DEBATE SOBRE LO NR. RESPUESTA PENDIENTE A URIOSTE DEL BLOG AGORA
Desde hace quince días A. Urioste tuvo la deferencia de recoger en su blog nuestra propuesta de lanzar una serie de debates pendientes en los distintos sectores en los que está fraccionado nuestro ambiente político. Por distintos motivo, no hemos podido contestar antes. Y creemos que ha valido el retraso de dos semanas habida cuenta de todo lo que ha ocurrido en este tiempo. Después de reflexionar sobre la situación de "lo NR" hemos decidido romper nuestro voto de no aludir nunca más a esta corriente en El Caracol (al no tener nada nuevo que añadir a lo ya dicho hasta ahora). Sin embargo, la aportación de Urioste en su blog, nos obliga a recoger el guante y responder.
CUANDO SE CIERRA LA PUERTA A LOS DEBATES… LOS DEBATES SE CUELAN POR LA VENTANA
Lo primero que ha ocurrido es que, ningún sector concreto ha aceptado abrir debates… aunque algunos elementos individuales de todos estos sectores hayan entrado en los debates que proponíamos. Por ejemplo, nosotros siempre hemos sido claros: a pesar de que no puede discriminarse a nadie por su forma de vestir o por su look, es rigurosamente cierto que hay que ser muy claros respecto a la presencia de skins y de otras tribus urbanas en el interior de los partidos.
Esta cuestión es particularmente acuciante en el entorno NR, dado que es ahí en donde generalmente se ubican buena parte de tribus skins. Debatir es ir a lo concreto y debatir supone, en última instancia, describir tendencias y ubicarse a un lado o a otro, en una palabra: elegir. Se puede permanecer callado ante problemas como el de la presencia de skins… para evitar perder a los skins afiliados al propio partido. Claro que se puede. El problema es que el lastre no desaparece. Y si se tiene lastre, no se vuela.
Desde el blog nr se ha lanzado la idea de una “hoja de ruta”. Bien, pero, ese lanzamiento se ha realizado hace casi dos meses y ahora todavía se permanece en los prolegómenos, además de que no queda muy claro a quien va dirigido el mensaje, en la medida en que, no solamente no están claro el campo de definición NR, sino que, además, tampoco está claro… lo que separa a lo NR de lo NS.
Luego se ha formado la Red Tercera Vía y la convocatoria del acto de la Coordinadora Nacional Revolucionaria, con todos los comentarios a que ha dado lugar. La impresión general es que se trata de un movimiento excesivamente atomizado, sin estructura de partido, juvenil, con demasiada ósmosis con el medio skin y, por tanto… de dudosa eficacia política.
Así pues, por lo que a nosotros se refiere, el “área NR” es equivalente al área ocupada por el MSR y ese partido es al que todos los NR deberían converger, especialmente si contemplan la posibilidad de un trabajo político y se desvinculan de veleidades propias de tribus urbanas. Harina de otro costal es que compartamos –y en el archivo de este blog hay varios artículos sobre el tema- algunas consignas de este partido (socialismo, tercerismo, federalismo) o sus reticencias a abordar el problema de la inmigración de manera nítida y lineal. Pero, si hay que ser realistas, fuera del MSR, no existe nada sólido que pueda ser llamado “corriente NR”, “ambiente NR”, o algo parecido.
Y, en consideración a este punto de partida, creemos:
1) Que la “hoja de ruta” solamente puede tomarse en consideración si es asumida por el MSR.
2) Que, a partir de ahora, por parte de El Caracol, cuando aludamos a “ambiente NR” estaremos hablando solamente del MSR
3) Que, fuera del MSR, no existe nada sólido que tenga un carácter político y que pueda llamarse NR. O dicho de otra manera: hay NR fuera del MSR… pero sin tener un carácter político, sino anecdótico, testimonial o residual.
SOBRE LA CONCEPCIÓN DEL PARTIDO DE URIOSTE
En general no hay objeciones a los planteamientos de Urioste que son, en buena medida los que ya hemos defendido desde El Caracol y que otros blogs como Infokrisis han desarrollado.
Resumimos la posición de Urioste:
1) El partido debe recoger la “sensibilidad social” de nuestra área
2) El proyecto no debe estar viciado por la presencia de prácticas o personas que son lastres.
3) No puede ser un populismo demagógico y simplón.
4) No se debe limitar a “nuestra área” sino captar en campos aparentemente contrarios.
5) El elemento identitario debe estar presente.
6) Hay que integrar los “cinturones rojos” y las sensibilidades regionales
7) Olvidar los debates históricos y las memorias históricas, centrándose en política ral
8) Los sectores a los que va dirigido deben ser mileuristas, familias y jubilados
9) El partido debe ser idealista y no defender la política-negocio
10) Debemos vendernos como una nueva forma de hacer política, como aire fresco.
11) El partido debe ser transversal en lo social y en lo identitario.
12) Hay que excluir a corrientes negativas, nada de extrema-derecha ni fachismo
13) Debe ser un partido con corrientes
En general compartimos los puntos de vista y el modelo de partido, si bien creemos que en algún punto es necesario afinar un poco más y aclarar algo más otros puntos.
Por ejemplo:
1) Es importante definir el área, y a quien incluye, porque de lo contrario estamos instalados en un terreno vidrioso. Para nosotros, el área se reduce al MSR y como máximo unos cuantos blogs no integrados en él, casi diríamos en un 95% al MSR y u 5% a “otros”.
2) No estamos muy seguros de que el MSR esté dispuesto a adoptar un giro identitario, entendiendo por identitario la referencia triple: a la identidad nacional, a la identidad europea y a las identidades regionales, reconociendo la importancia de los valores étnicos, como primer factor de identidad.
Sobre la exclusión de algunos elementos “viciados”. Es inevitable, pero también aquí hay que matizar:
1) Existen elementos que podemos calificar de enfermos, paranoicos, consumidores de sustancias toxicas, o simplemente caudillitos de opereta y a todo lo que hemos bautizado en este blog como “nacional-pardillismo”, una banda de impresentable capaces solamente de atraer pardillos.
2) Y existen biografías de exdirigentes que, por su historial político anterior, no es aconsejable que figuren en primera fila, pero que no puede prescindirse ellos, a causa de su experiencia política y de sus contactos y conocimientos. Simplemente, se trata de que al frente estén gente eficaz, creativa y sin que se les puede echar el sambenito de “ultras” a causa de su pasado.
Sobe los grupos sociales a los que debe ir dirigido el mensaje:
1) Estamos de acuerdo en la transversalidad del partido, en evitar el populismo facilón y la demagogia de baratillo.
2) Estamos de acuerdo que hay que trabajar los “cinturones rojos” de las grandes ciudades… las zonas de conflicto con los contingentes migratorios masivos.
3) Estamos de acuerdo en alternar el carácter identitario con el social.
4) Estamos de acuerdo en la alusión a las “sensibilidades regionales”, y añadimos que es preciso aludir a la teoría de los tres niveles identitarios (regional, nacional, europeo), sin la cual no puede hablarse de una identidad completa.
5) Estamos de acuerdo en que hay que trabajar sobre “mileuristas”, jubilados y familias. Pero esto hay que matizarlo. Habría que hacer alusión a la clase media y clase materia-baja o, más genéricamente, a las clases trabajadoras. Pero, aún así, es posible apurar un poco más el análisis y aludir a las clases que más brutalmente experimentan los contratos basura y la precariedad laboral. La población de los guetos de inmigración y de las zonas urbanas limítrofes. Los matrimonios jóvenes con hijos en edad escolar.
6) Estamos de acuerdo en que el partido debe huir de “verdades históricas” y de volver eternamente la vista atrás. No es tarea de un partido, recordar ni interpretar el pasado, mucho menos el reciente, sino construir el futuro.
7) Estamos de acuerdo en que debe ser un “partido idealista” y que debe aportar una bocanada de aire fresco en la politica española. Ahora bien, una cosa es ser “idealista” y otra desconocer la realidad política y hasta qué punto se puede operar sobre ella. La máxima debe ser en este terreno: “tener los pies en la tierra y la cabeza en el cielo”. Está claro, por lo demás que hay que excluir y denunciar a todos aquellos que aspiran a servirse de la política para aumentar su patrimonio.
8) Estamos de acuerdo en que dentro del partido deben de existir distintas sensibilidades… pero discrepamos sobre el partido con corrientes organizadas. Y en los días próximos incidiremos un poco más en este tema. Las corrientes son el refugio desestabilizador de antiguas organizaciones que no se resignan a desaparecer y que aspiran a mantener su especificidad.
9) Por supuesto, debe tratarse de un partido desvinculado de usos, costumbres, ritos, símbolos y actitudes propias de la extrema-derecha y de los movimientos históricos de los años 30.
Ahora bien, todos estos puntos de acuerdo son importantes, pero no dicen gran cosa sobre algunos de los temas de fondo. Por ejemplo:
- Un partido de estas características, con sensibilidad social e identitaria, no tiene por qué identificarse necesariamente como “nacional-revolucionario”. Es más, si lo NR es una catalogación ideológica, lo que un partido debe vender hoy no es una ideología (ver todo lo escrito en El Caracol y en Infokrisis sobre la muerte de las ideologías) sino un programa y una ilusión: la “nueva forma de hacer política” de la que habla Urioste.
- Creemos que es importante adoptar un “modelo de partido”: el autor parece decantarse con el “modelo frente”. Por nuestra parte, ya hemos aludido en varias ocasiones al “partido flash” y al “modelo en red” que consideramos mucho más adaptados al actual momento histórico.
ALGUNAS PRECISIONES SOBRE EL CONCEPTO NR
La última parte de la intervención de Urioste se dedica a definir un poco más el ambiente NR y sus diferencias con los NS. Resumimos las posiciones de Urioste en este terreno:
1) El nacionalsocialismo tiene una insalvable carga negativa a pesar de que su núcleo, el “socialismo nacional”, sea el núcleo del “tercerismo”.
2) La corriente NR es renovadora, ecléctica y heterodoxa.
3) La evolución en el campo político es el identarismo gracias a la influencia de la Nueva Derecha “metapolitica” y el europeismo.
4) Y, finalmente, toda la corriente NR es un “frente amplio” en sí mismo: obreristas, strasseristas, revolucionarias, etc.
5) Finalmente, ninguna corriente tiene fuerza suficiente para nada. Y todos los partidos actualmente existentes están en el mismo punto de partida.
6) La corriente NR es “bastante amplia” y en la actualidad se articula “de forma autónoma (…) hasta reencontrar su esencia (…) y esto para por la Coordinadora NR como por la hoja de ruta”. Esta corriente debe estar articulada dentro de un frente aún más amplio.
Discrepamos completamente de este punto de vista. Si empezamos a considerar las distintas corrientes NR, desde los “nacional-bolcheviques” hasta los “identitarios”, podemos establecer media docena de subsectores… en su totalidad, completamente irrelevantes y detrás de los cuales no existe nada sólido ni consistente, con todo un bollo añadido de skins, centrales o periféricos, y, por lo que estos mismos medios han aireado en sus propios blogs, incluyen también delincuentes (y es la conclusión del post del blog nr sobre la Hoja de Ruta (2).
Todo este ambiente es extremadamente reducido, juvenil y aislado políticamente. Una mera anécdota sin interés político. Hay que leer los blogs de estos grupos para llegar al fondo de sus posibilidades: y estas son muy desiguales, reeditan el dejâ vù de Bases Autónomas: verbalismo hiper-revolucionario, posiciones paradójicas, ganas de “romper esquemas”, utopismo revolucionario, incompatibilidad con cualquier otra corriente ajena, conflictualidad permanente interna recurriendo a todo tipo de escudos exóticos (nacional-bolchevismo, strasserismo, frentenegrismo, nacional-guevarismo, nazi-maoismo, etc.), un conjunto imposible de ser tomado en serio por nadie situado fuera de los muros juveniles de estos círculos.
Tiene razón el autor cuando dice que todos estos grupos están en el punto de salida y representan poco, pero no hay que olvidar que los grupos deben medirse por su capacidad de crecimiento y la capacidad de crecimiento de este sector NR es el siguiente: grupo juvenil, siempre con gente… joven, los que salen son sustituidos siempre por otros que entran, al cabo de los años el grupo sigue teniendo una edad media de 20 años y “redescubriendo” la pólvora. Insistimos: dejando aparte, al MSR, el resto de grupos están hoy haciendo lo mismo que lo que hacían hace 20 años Bases Autónomas. Conclusión: cuando se dan las mismas situaciones de presión y temperatura y están presentes los mismos factores, se produce el mismo efecto. Resumiendo: hasta el MSR es posible discutir y debatir… más allá del MSR no vale la pena ni discutir ni debatir.
Contrariamente a lo que dice Urioste, para nosotros:
1) la corriente NR no es ecléctica, renovadora y heterodoxa, sino caótica, desordenada e inmadura. Es cierto que es un “frente en sí misma”… pero este frente tiene una capacidad de crecimiento reducidísma y se dedica a cultivar los exotismos políticos. Este ambiente introduce un elemento de radicalismo díscolo, revolucionarismo verbal y expontaneismo muy ingenuo por lo demás, fuera de lugar en una opción que aspire a tener una mínima incidencia.
2) tiene muy poco que ver con influencias evolianas, o de la nueva derecha o ideas metapolíticas o de Jean Thiriart, es un amasijo de consignas panfletarias y gesticulaciones ultrarrevolucionarias… que no tienen cabida en un movimiento político que aspire a enlazar con los intereses y los problemas de la población.
TERCERISMO E IDENTITARISMO
Con la última parte del escrito de Urioste no podemos por menos que manifestar un profundo desacuerdo. La pregunta que nosotros planteábamos era: “3. ¿El nacionalismo-revolucionario debe ser “tercerista” o “identitario”, se puede defender al mismo tiempo a regímenes iberoamericanos o islámicos, mientras que España pierde su identidad a causa de inmigrantes andinos o magrebíes?”.
Urioste responde, más o menos, que si. En este sentido habría que saludar al régimen de Chávez, al de Evo Morales, al castirsmo y a los regímenes revolucionarios y socialistas de los países árabes… Y añade: “Tanto la tercera vía como el identitarismo deben defender que cada cultura se desarrolle en su propia tierra. Esto, inevitablemente pasa por defender regímenes iberoamericanos o arabistas, no islamistas, que sean identitarios y “altermundistas”…
Veamos: lo que nosotros defendemos es justamente lo contrario. No hay ninguna razón que obligue perentoriamente a definirse en relación al último gobierno iberoamericano. El hecho de que un gobierno sea “antiyanki” no implica necesariamente que aporte gran cosa. En el caso, por ejemplo de Evo Morales, se aporta odio étnico hacia España y toda la retórica “bolivariana”, esconde ese odio hacia el papel civilizador de España. Si se trata de antiyankis, valdría la pena pronunciarse a favor del régimen de Corea del Norte o de Al Qaeda, sin ir más lejos. El antiyankismo, no es determinante a la hora de levantar una opción política en España.
En lo que se refiere al mundo árabe… la situación es aun peor. Ya no existe panarabismo, ni gobiernos paranabistas, ni siquiera gobiernos laicos… En toda la “dorsal islámica”, desde Marruecos a Filipinas, lo que se imponen son movimiento políticos basados en el Islam. O dicho de otra manera: el fundamentalismo islámico es la principal fuerza política o social de esta zona… y frente a ella, el panarabismo es casi completamente inexistente (salvo en Siria y con salvedades). Y, por mucho que nos solidaricemos con el “pueblo palestino”, por muchas loas, glosas y alabanzas que cantemos sobre la “resistencia en Irak”… repito: la fuerza política y social mayoritaria hasta la exasperación en estas zonas es el islamismo. No otra. ¿Qué le vamos a hacer si esa es su “identidad” y si el islam es la única referencia identitaria entre los pueblos del desierto?
Pero hay algo decisivo: es inútil solidarizarse o hacer causa común con quien experimenta náusea por caminar contigo. Podrás solidarizarte con el último muerto palestino, podrás desgañitarte en gritos contra “los yankis”, podrás glosar todos los movimientos de liberación nacional del mundo mundial… pero todo eso no servirá de nada si, junto a eso dices: no a inmigrantes islámicos en Europa y no más andinos en España. La credibilidad del mensaje se resiente por las solidaridades demostradas. Y hay algo importante: no te solidarices con quien no está dispuesto a solidarizarse con tu causa. ¿A qué viene solidarizarse con el “pueblo palestino”… si al “pueblo palestino” le importa un higo la llegada masiva de islamistas a Europa…? ¿a que viene solidarizarse con todos los evos morales de la vida si Evo Morales, ni por equivocación estará dispuesto a mostrar ni una vez su solidaridad con los que clamamos “NO MAS ANDINOS EN ESPAÑA”? ¿Qué es eso de solidarizarse sin recibir ninguna compensación política a cambio…?
El mensaje de un partido transversal tiene que ser: CLARO, ROTUNDO, NO CONTRADICTORIO, SIN DOBLECES, ESENCIAL Y DIRIGIDO A GRUPOS SOCIALES DE NUESTRO PAÍS. Y, por lo mismo, no precisa solidarizarse necesariamente ni con nada ni con nadie… que antes no haya demostrado solidaridad, comprensión y apoyo con nuestra lucha en Europa.
Si además de los problemas de definición (nacional-bolcheviques, socialistas-identitarios, straseristas, euroasiáticos, etc.) unimos todo este régimen de solidaridades exóticas (con Chávez, con el Ché, con Evo Morales, con los palestinos -¿de Al Fatal? ¿de Hamas o Hezbollah?- con los montoneros, etc.), ¿habrá alguien capaz de entender todo este galimatías? Mucho nos tememos que no.